El embarazo puede afectar a la salud de los pies debido principalmente a problemas circulatorios, a la retención de líquidos, el cambio de peso, la modificación del centro de gravedad y en verano, al calor.
Una de las afecciones más habituales es la hinchazón de pies, que puede causar dolor y molestias al caminar y generar edemas. Además, esto a su vez puede hacer que las uñas se encarnen.
Otra consecuencia en las últimas semanas del embarazo es que la planta de los pies se sobrecarga mucho.
Por otro lado, debido a los cambios hormonales también es habitual que los talones se agrieten y aparezca mal olor de pies ya que sudan más.
Por todo ello es imprescindible no descuidar la salud de nuestros pies durante el embarazo. Te dejamos 7 consejos que te ayudarán a mantener tus pies sanos:
- Dar paseos: estos ayudan a mejorar la circulación lo que ayudará a bajar la hinchazón.
- Controlar el peso: se deben seguir las recomendaciones médicas sobre el peso saludable para cada etapa del embarazo. Para ello se debe realizar ejercicio moderado diariamente, evitar el sedentarismo y controlar la dieta.
- Pies en alto: poner las piernas elevadas mejora la retención de líquidos. También se debe evitar permanecer en la misma posición durante mucho tiempo.
- Hidratar los pies: es recomendable utilizar crema diariamente para evitar la sequedad y las grietas en los talones.
- Masajear los pies: esto favorece la circulación.
- Plantillas personalizadas: lo ideal es realizar un estudio biomecánico de la pisada para determinar qué partes del pie están sobrecargándose y crear una plantilla específica.
- Evita el calor: la exposición durante mucho tiempo al sol o fuentes de calor (radiadores, estufas…) hace que aumente la temperatura corporal y empeora la hinchazón de los pies.
Estas son solo algunas pautas generales que te ayudarán a evitar problemas en tus pies durante el embarazo. Ante cualquier duda o dolencia acude a un podólogo titulado y colegiado quién te indicará la mejor forma de proceder.